Que me explique alguien este sinsentido de
mariposas muertas.
Retortijones para los que son más del campo
que yo…
Estas noches en las que no duermo hasta que
sale el sol.
¿Desde cuándo le tengo miedo a la oscuridad?
Que he borrado mi pasado y o no me importa, o
mi cuerpo no sabe si le importa,
que miro a la nada más que antes y me veo
reflejado.
Y limpio el vaho del espejo.
El sudor de mi frente.
Vomito de nuevo.
Recorre el frío mi nuca y vuelven las arcadas.
Y echo de menos a mi abuela.
Estoy pálido y con vida por fuera y no por
dentro.
Que miro a la pantalla y se me nublan los
recuerdos,
se juntan las letras y me dicen que soy
subnormal.
Nada nuevo.
Lo he hecho mal y no me arrepiento, porque se
ha acabado.
Yo lo he acabado. Quería que se acabase.
Y esto no tiene sentido para ninguno de
vosotros, que creéis que aún hablo de mi ex…
Ingenuos, que pensáis que la vida se limita a
querer hasta que te destrozan.
Esto es algo que solo entiendo yo, porque ya
he pasado por ello.
Me vuelve a visitar y esta vez no es 16 de
septiembre.
Qué gilipollas he sido todo este tiempo
pensando que estaba bien.
Y sigo escribiendo más frases, y más, y más. Y
me cansa no saber qué decir, qué contar, si no cuento ovejas desde hace días,
ni me dirijo la palabra.
Miro las fotos y me veo sonriendo.
Miro la cámara del móvil para saber si sonrío
y es que soy tan tonto que no me he dado cuenta, pero no es así.
Palidezco y tengo la boca pastosa de vomitar
las mismas palabras una y otra vez en mi mente.
No quiero más palmaditas en la espalda.
Más “eres demasiado maduro para la edad que
tienes”.
Más “eres demasiado inmaduro para la edad que
tienes”.
No quiero un feedback sin comunicación ni
raciocinio.
No quiero que os pongáis mis zapatos porque “sepáis”
caminar con tacones de aguja.
Tú no has pasado por aquí.
Zorra, estos zapatos no están hechos para
caminar,
y este gilipollas está cansado de correr
detrás de sí mismo.
Bienvenida de nuevo, vieja amiga.
6:03 a.m.
No hay comentarios:
Publicar un comentario